“Bautizar a tu propio hijo es una bendición” DICE.
En una ceremonia íntima en su iglesia episcopal en Miami, el sacerdote cubanoamericano Alberto Cutié bautizó el domingo a su propio hijo, Alberto Felipe.
Mientras cielos grises amenazaban con un diluvio que milagrosamente no se materializó, dentro de la Iglesia de la Resurrección de Biscayne Park, Florida, el agua bendita fluyó el domingo por la mañana sobre la cabecita de Alberto Felipe, de un mes y medio, quien fue bautizado por su padre, el Rev. Alberto Cutié.
“Que esta luz, la luz de la fe y del bautismo lo guíe a la luz que nunca se acaba, a la luz de la vida eterna”, dijo Cutié tras encender las velas que entregó a los padrinos del niño: la hermana del sacerdote, Alina Cutié Rodríguez; el esposo de esta, Freddy Rodríguez; el hermano de Ruhama, Hermes Canellis e Ileana Canellis.
Todos fueron felices testigos de este más reciente capítulo en la vida de Cutié, quien tras admitir que sostenía un romance con su ahora esposa, se apartó de la iglesia católica romana y se unió a la episcopal para casarse con ella en junio del 2009.
“Estoy feliz y en paz”, aseguró una risueña Ruhama una vez terminada la misa, que fue seguida por una pequeña recepción en la iglesia, localizada al norte de Miami. “Hoy es un día de muchas bendiciones. Estamos felices”.
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